TESTIMONIOS

26 DE JULIO 2020

Qué son los cuidados paliativos? Eso me pregunté cuando llamé por primera vez. Qué alcance tienen? La verdad es que sólo podés responderte esas preguntas, una vez que transitás de la mano de ellos. Si me pidieran que mencione una palabra para caracterizar la labor de la Fundación Solatium, sería AGRADECIMIENTO.

No puedo imaginarme haber transitado por la enfermedad de mi papá, un cáncer de pulmón que luego se agravó a otras partes de su cuerpo, sin el inmensurable acompañamiento de Uds. Lo digo por mí, pero principalmente lo digo por mi papá, porque así lo sintió él.

Para nosotros una gran pata en este camino fue LA FAMILIA (mi mamá, mis hermanos, mi esposo, mi hija y más) … y la otra, LA FUNDACIÓN.

No es sólo la medicación que ayuda a paliar el dolor, sobrellevarlo y a veces lograr su ausencia…es el tener la tranquilidad que “para lo que se necesite”, ESTÁN, sin importar la hora, sin importar si es la cuarta vez que nos comunicamos por lo mismo, siempre hay algo más por hacer, por lograr un mayor bienestar para la persona que transita por la enfermedad y su familia.

Sólo con ustedes pude realmente incorporar la importancia que tiene el RESPETAR  la voluntad de la persona enferma, en todo aspecto, es tan valeroso…y ahora mirándolo a la distancia, da tanta paz y tranquilidad!

Recuerdo ver el rostro de mi papá luego de comunicarse con ANITA…era de calma. No era sólo una promesa lo que recibía del otro lado…era la “palabra” de que el dolor podía ser controlado, que era lo que más lo asustaba. Sentí en todo momento que hubo un equipo trabajando en el acompañamiento, pero no puedo dejar de mencionar al Dr. Rais por su presencia, que a pesar de la situación mundial que nos toca vivir, en la que no podemos tener contacto prácticamente, no se sintió en absoluto la ausencia.

Gracias por haber hablado con mi papá, gracias por haberse preocupado por atender su dolor, de poner su conocimiento al servicio de nosotros. Gracias Daniel por haber sido vos quien nos asistió esa tarde con toda tu amabilidad y tranquilidad, dándonos una clase a toda la familia de cómo ser enfermeritos. Y obviamente….gracias ANITA…una calidez humana sin medida, gracias por haberme abierto “la puerta” para tener la certeza que podía y puedo contar con vos. Cuán importante es tu labor….podía hacerte cualquier pregunta y siempre tenías la palabra adecuada y dulce para responderme. Siento que si pude decirle a mi papá todo lo que necesité, fue en gran medida, a VOS. Agradezco que hayas estado “disponible” en su momento para la familia, para mi PAPÁ!

Un hasta siempre a la FUNDACIÓN SOLATIUM, agradeciendo inmensamente por la labor, podría decir, imprescindible de permitir de una manera “humana” acompañar a las personas en su último transitar por la VIDA.

Daniela Komjati, hija de Antonio!

Cipolletti , Enero 2020

Hace unos días despedimos a nuestro padre en su viaje a la eternidad. Creo que nadie está preparado para enfrentar la muerte de un ser querido. Cuando hace unos meses recibimos el peor diagnostico, nos impactó, fue un sacudón y comenzamos a interiorizarnos en tratamientos. especialistas y pormenores de la enfermedad. De pronto sentimos que no sabíamos cómo actuar en determinados momentos, como ayudarlo en las quimios, en sus momentos de angustia… en lo que se venía. Es así como descubrimos la Fundación Solatium y sin dudar les escribimos. La respuesta fue inmediata. A pesar de que el cupo estaba completo fuimos bendecidos con el acompañamiento de cuidados paliativos por parte de un grupo de personas maravillosas: el Dr Carlos Rais, la Dra Eugenia Aguirre , y las voluntarias Sofia y Diana. Agradecemos infinitamente la empatía, amabilidad, cercanía, cariño en el trato personal lo que supone una extraordinaria ayuda cuando la anhelada mejoría no puede llegar. Vaya desde aquí nuestro agradecimiento a su profesionalidad en la constante búsqueda de soluciones adecuadas para aliviar los síntomas de la enfermedad y procurar que la última etapa de su vida fuera menos dura y más llevadera. Nos ayudaron a fortalecernos como familia, acompañar y disfrutar al esposo, papá, abuelo, hermano en cada momento y hasta el último minuto de su vida. No hay palabras para agradecer, no existe tiempo ni forma a pagar todo lo recibido . Gracias por la atención y aliento en algo tan inexplicable y tan doloroso como la muerte . Nunca pensamos que doliera tanto…Quedamos a su disposición.

Un abrazo de la familia de Antonio Benito Oviedo, Martha, Adriana, Marcela, Andrea , Fernanda y familia

De pronto sentimos que no sabíamos cómo actuar en determinados momentos, como ayudarlo en las quimios, en sus momentos de angustia… en lo que se venía.

Es así como descubrimos la Fundación Solatium y sin dudar les escribimos. La respuesta fue inmediata. A pesar de que el cupo estaba completo fuimos bendecidos con el acompañamiento de cuidados paliativos por parte de un grupo de personas maravillosas: el Dr Carlos Rais, la Dra Eugenia Aguirre , y las voluntarias Sofia y Diana.

Agradecemos infinitamente la empatía, amabilidad, cercanía, cariño en el trato personal lo que supone una extraordinaria ayuda cuando la anhelada mejoría no puede llegar. Vaya desde aquí nuestro agradecimiento a su profesionalidad en la constante búsqueda de soluciones adecuadas para aliviar los síntomas de la enfermedad y procurar que la última etapa de su vida fuera menos dura y más llevadera. Nos ayudaron a fortalecernos como familia, acompañar y disfrutar al esposo, papá, abuelo, hermano en cada momento y hasta el último minuto de su vida.

No hay palabras para agradecer, no existe tiempo ni forma a pagar todo lo recibido . Gracias por la atención y aliento en algo tan inexplicable y tan doloroso como la muerte . Nunca pensamos que doliera tanto…Quedamos a su disposición.

Un abrazo de la familia de Antonio Benito Oviedo, Martha, Adriana, Marcela, Andrea , Fernanda y familia

Cipolletti, diciembre 2018

Con este simple mensaje les quiero agradecer a todos Uds el hecho de estar cuando nos sentíamos desorientados, sin dar con la ayuda necesaria para que mi papá dejara de tener dolores…cuando Uds llegaron a nuestra casa sentí algo muy especial, alivio y amor, porque sin conocer a mi papá y a mi familia, sin pedir nada a cambio, nos enseñaron a cuidarlo y nos acompañaron hasta su último día.

Siento mucho la ausencia de él, la tristeza creo que voy a poder curarla con el tiempo…espero volver a verlos y ver la forma de devolverles su tiempo y compañía. Viviana Hayett y familia.